La empresa automotriz china BYD ha alcanzado un nuevo hito en su trayectoria como líder del mercado de vehículos eléctricos (EV). Durante 2024, la compañía registró ingresos por 107 mil millones de dólares, superando por primera vez a su principal competidor global, Tesla, que cerró el mismo periodo con 97.7 mil millones de dólares.
Crecimiento sostenido y liderazgo en producción
Este incremento representa un crecimiento interanual del 29% para BYD. Aunque Tesla mantiene una ventaja en términos de rentabilidad, con 7.1 mil millones de dólares en ganancias (margen del 7.3%) frente a los 5.44 mil millones de BYD (margen del 5.1%), los resultados financieros confirman el avance sostenido de BYD en el sector.
La preferencia creciente por marcas nacionales en el mercado chino, junto con una oferta de vehículos tecnológicamente avanzados y accesibles, ha fortalecido la posición de BYD frente a fabricantes internacionales.
Una fábrica del tamaño de una ciudad
En paralelo a su crecimiento financiero, BYD también está realizando una ambiciosa inversión en infraestructura con su nuevo complejo industrial en Zhengzhou, capital de la provincia de Henan. La planta, aún en desarrollo, se extenderá sobre aproximadamente 50 millas cuadradas (alrededor de 129 kilómetros cuadrados), lo que equivale al tamaño de toda la ciudad de San Francisco.
Este complejo, dividido en ocho fases de construcción, ya alberga a 60,000 empleados, con planes para incorporar hasta 200,000 trabajadores adicionales. Además de la capacidad productiva, el sitio incluirá residencias, servicios recreativos y espacios de uso común para el personal. Una vez en operación plena, la planta podría alcanzar una producción anual de un millón de vehículos eléctricos, lo que cubriría aproximadamente una cuarta parte de las ventas totales de BYD en 2024.
Un posicionamiento estratégico a nivel global
La consolidación de BYD como una potencia mundial en el mercado de vehículos eléctricos es un caso digno de análisis académico. La compañía ha logrado posicionarse como un competidor directo de Tesla, superándolo en volumen de producción y en ingresos anuales.
El hecho de superar los 100 mil millones de dólares en ingresos y desarrollar una planta de dimensiones urbanas no solo representa un avance industrial, sino también una declaración estratégica. BYD está marcando su intención de convertirse en uno de los líderes indiscutibles del sector automotriz global, con un papel protagónico en el futuro de la movilidad eléctrica, cuyas bases podrían estarse definiendo en su complejo de Zhengzhou.